viernes, 13 de mayo de 2011

QUICHE DE PERAS Y QUESOS ROQUEFORT Y CABRA


Las quiches, si no se tiene que preparar la masa, es una solución rápida y fácil para una comida. Ésta es un poco especial, una quiche de peras, queso roquefort y queso rulo de cabra.
La base de las quiches suele ser casi siempre igual, una masa quebrada y una mezcla de nata y huevos. Después el relleno que más nos guste. Aunque me gusta hacer masas, si no voy a hacer una masa especial para la quiche (añadiendole algún sabor o semillas, prefiero comprarla). Ésta
es comprada. El proceso sería el siguiente.
INGREDIENTES:
-1 base para quiches (hay diferentes marcas y precios, la más cara unos 2,5 euros)
-180 ml de nata
-3 huevos
-Un par de peras. Yo he usado peras "Conferencia" que tiene una muy buena consistencia a la
hora del horneado.
-Queso Rulo de Cabra
-Queso Roquefort
-Sal, pimienta, nuez moscada.
PROCESO:
-En un molde apropiado para quiches, extendemos la masa, adaptándola bien a él. Si usamos una base comprada, suele venir en un papel sulfurizado, listo para hornear, la extendemos con el papel. Si es una masa preparada por nosotros, deberemos untar el molde con mantequilla, para
poder desmoldarlo bien.
-Horneamos esa masa "a ciegas" unos 15-20 minutos a 180 grados. Hornear a ciegas significa sin
el relleno. O sea, que horneamos la masa primero. Para esto, llenamos el molde de legumbres secas para que hagan peso y la masa NO suba.
-Cortamos la pera en rodajas y la disponemos sobre la base de la masa previamente horneada.
-Cortamos los quesos y lo vamos poniendo sobre las peras a nuestro gusto.
-Aparte, hemos mezclado la nata con los huevos. La hemos salpimentado y añadido un poco de
nuez mosada. Vertemos esta mezcla sobre la base horneada con los quesos.
-Horneamos unos 20 minutos en el horno a 180º o hasta que la quiche cuaje.
TRUCO:
Si no os gusta mucho el sabor de la nata (a mí por ejemplo), podéis calentar en una sartén algún
tipo de queso que se diluya fácilmente con la nata. Así esta tomará también el sabor del queso.
No demasiado queso, se trata sólo de matar el sabor de la nata, no de que espese demasiado. Esperar a que enfríe antes de mezclarla con los huevos.
En esta quiche, el sabor suave de las peras combina perfectamente con el sabor fuerte de los quesos.

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